¿Jugar futbol hasta morir?

Foto: @dbulandshold

[/et_pb_text][/et_pb_column][/et_pb_row][et_pb_row _builder_version=”4.10.7″ _module_preset=”default” column_structure=”1_2,1_2″][et_pb_column _builder_version=”4.10.7″ _module_preset=”default” type=”1_2″][et_pb_text _builder_version=”4.10.7″ _module_preset=”default” hover_enabled=”0″ sticky_enabled=”0″]

La Eurocopa pasada uno de los momentos más marcados del torneo fue cuando el jugador danés Eriksen tuvo un paro cardiaco y tuvo que ser reanimado dentro de las canchas, el día de ayer, en el futbol de Noruega pasó lo mismo con Emil Palsson en la segunda división. No tengo dudas que numerosos casos como estos habrán pasado en todo el mundo, pero, y ¿qué ha cambiado?

Paros cardiacos, arritmias, golpes de cabeza, desmayos. Estos son algunos de los riesgos que los futbolistas tienen que enfrentar cada partido, cada minuto, cada jugada, cada gol, pero al final todo esto queda en la frase: Es un deporte de contacto. Al futbolista le exigimos un nivel, esfuerzo, ganas, educación, y tenemos razón, por esto, también tenemos que exigir a los clubes, porque los futbolistas también son trabajadores, y como tales merecen tener condiciones dignas para laborar, y una de ellas debe de ser el acceso a asistencia médica de calidad en cualquier momento, pero más que nada en los partidos.

Hasta cuándo dejaremos que accidentes que han pasado en otros deportes como el boxeo, la lucha libre, o espectáculos como la F1, que han llegado los accidentes hasta el límite, haciendo que los atletas pierdan hasta la vida. ¿De verdad 90 minutos, un balón, un ring, una cancha, una raqueta, un bate, valen más que un deportista sano? 

Nos hemos dejado envolver por comentarios que las principales ligas, o las primermundistas se basan en el nivel del futbol, pero creo que no debería ser lo único que importe en el deporte. Las condiciones, la salud, el crecimiento de los jugadores… todo debería de exigirse junto al espectáculo. Pero no hay que olvidar algo, hasta en las principales ligas del mundo, en torneos de élite internacional, esto sigue pasando. No son cosas que vivimos en Latinoamérica, en ligas africanas o asiáticas, en norteamericanas, son pilares del deporte que han sido olvidados en todo el mundo.

¿Hasta cuándo veremos a los deportistas como gladiadores en el coliseo?