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Violeta, Mon Laferte y el legado artístico de las latinoamericanas

Mon Laferte y Violeta Parra nos recuerdan la relevancia de nuestra voz histórica y cultural a través de la exposición del museo MUSA de la UDG, que cerrará al público este domingo 11 de mayo

María Paula Sumano Guribi

Recolectoras, la exposición curada por Beatriz Bustos Oyanedel y que cierra este domingo 11 de mayo en el MUSA de la UDG, entreteje el pasado del arte femenino chileno con el contemporáneo a partir del legado de dos de las artistas más influyentes de su historia.

Mon Laferte (1983), cantautora chilena y activista, se ha consolidado como una de las figuras más relevantes de la música latinoamericana. Con ocho álbumes y dos premios Grammy Latinos, es casi imposible encontrar a algún latino que no la conozca. En esta exposición, la cantante revela una faceta distinta de su exploración artística, con piezas que dialogan con la plástica y el archivo de su propia vida, así como con la de una de sus grandes inspiraciones: Violeta Parra, a quien ha tomado como referencia directa en gran parte de su obra, incluso representándola de forma pictórica.

Violeta Parra (1917-1967) fue una de las figuras más significativas de la música popular chilena del siglo XX: artista de radio, compositora, recopiladora folclórica, artista plástica y poeta. Desde la década de 1950, Parra y su familia configuraron el punto de partida del movimiento musical chileno, enlazándose con el movimiento conocido como Nueva Canción Chilena.

Mon Laferte ha utilizado su plataforma para denunciar la violencia de género, la discriminación y la injusticia social en diversas ocasiones. Asimismo, ha apoyado movimientos feministas y ha participado activamente en iniciativas en defensa de los derechos humanos.

En esta exposición, vuelve a resaltar la trascendencia de la mirada femenina en el arte, la cultura y la sociedad, acompañada por un extenso equipo con el que colaboró para dar vida a esta muestra. Podemos notar la delicadeza con que se cuidaron los detalles, incluso en decisiones sutiles, como pintar los muros de morado, color que diversas colectivas feministas latinoamericanas han adoptado como símbolo de lucha.

Imágenes de la exposición Recolectoras en el MUSA. Fotografías: María Paula Sumano Garibi.

Muñecas

Al ingresar a la sala, nos encontramos con una muñeca de tamaño real que parece representar a Mon vestida de novia. Esta pieza admite múltiples interpretaciones; lo que sí resulta claro es que está atravesada por la experiencia sociocultural de la mujer iberoamericana y las expectativas sociales que se nos imponen: su vestimenta alude a cómo el matrimonio condiciona nuestra autonomía, mientras que la figura de una muñeca remite a la expectativa que se nos coloca desde la infancia: “jugar” con figuras humanas a las que deben cuidar, preparándose para convertirse, al crecer, en una especie de muñeca nosotras mismas, bien vestidas y de buen mirar, para “conseguir” un buen marido.

Sin embargo, la muñeca creada por Mon rompe con las proporciones y la estética tradicionales: sus ojos saltones y asimétricos, la cabeza desproporcionadamente grande, las marcadas líneas de expresión y su semblante triste y cansado se alejan radicalmente del canon hegemónico de belleza proyectado sobre las mujeres.

Imágenes de la exposición Recolectoras en el MUSA. Fotografías: María Paula Sumano Garibi.

A su izquierda se encuentran dos piezas monumentales de arte textil: una de Violeta Parra, parte del archivo del arte chileno de los años sesenta, y otra de Mon Laferte, de carácter contemporáneo. Al colocarlas lado a lado, es evidente la referencia directa de Mon a Parra, tanto en las proporciones como en los materiales utilizados. En su obra, Laferte denuncia la violencia simbólica a través del uso de palabras como puta, así como la objetificación, el morbo y los estigmas que aún persisten en torno al cuerpo femenino.

Otras piezas de Mon también se exhiben: una serie de retratos que, desde mi perspectiva, evocan el estilo pictórico de los autorretratos de Frida Kahlo, y una serie de obras realizadas en colaboración con la Fundación Artesanías de Chile. Estas piezas revalorizan la importancia cultural, histórica y patrimonial del arte popular chileno y la esencia del lenguaje visual desarrollado por mujeres iberoamericanas a lo largo de la historia.

En el lado opuesto de la sala, se presenta una extensa colección de archivo que conecta las trayectorias de ambas artistas (Violeta y Mon) mediante fotografías de sus procesos creativos, videos, discografías y otros materiales que permiten apreciar la profundidad de su legado. Este archivo es resultado de una colaboración entre múltiples instituciones dedicadas a preservar el patrimonio cultural y artístico de Chile: el Archivo Central Andrés Bello de la Universidad de Chile, Radio Universidad de Concepción, la Cineteca Nacional de Chile, la Casa Museo Eduardo Frei Montalva, Chilefilms, el Museo Violeta Parra, entre otros.

“Alta“ cultura y “baja“ cultura

Llevar este tipo de muestras a espacios culturales académicos, hegemónicos y legitimadores, como lo es el MUSA, uno de los museos de arte más importantes y con mayor trayectoria en Guadalajara, respaldado por la universidad de la ciudad, representa un acto trascendental. Contribuye a cuestionar y desdibujar la dicotomía artificial entre la llamada “alta cultura” y la “baja cultura”. Esta exposición no solo pone de relieve a la artesanía y las expresiones culturales ancestrales de Latinoamérica, sino que lo hace a través del trabajo de mujeres artistas, históricamente desplazadas de los relatos oficiales, no solo del arte, sino de la historia en general.

Imágenes de la exposición Recolectoras en el MUSA. Fotografías: María Paula Sumano Garibi.

A título personal, como estudiante de historia, curaduría, crítica de arte y procesos creativos, pocas experiencias me han conmovido tanto como esta exposición. Me sentí profundamente identificada con lo que vi; las obras parecían contar mi historia a través de la suya. A pesar de tratarse de países distintos (México y Chile), logré conectar, y espero que muchas más personas lo hagan también. Considero importante retomar los diálogos que atraviesan esta muestra: la memoria histórica del arte popular, de Latinoamérica, de las mujeres, de la violencia de género, entre otros.

La exposición se presenta en el marco de la Feria Internacional de la Música de Guadalajara (FIM GDL) y estará abierta al público, sin costo, hasta el 11 de mayo de 2025 en el MUSA, Museo de las Artes de la Universidad de Guadalajara, ubicado en Juárez 975, colonia Americana, Guadalajara. El recinto permanece cerrado los lunes.

Espero que muchas mexicanas se den la oportunidad de encontrarse con esta exposición.

Referencias

Barbieri, C. (2025, 14 marzo). Mon Laferte: Biografía, historia, música y activismo. Marie Claire México. https://marieclaire.com.mx/mon-laferte-biografia/

Violeta Parra (1917-1967). (s. f.). Memoria Chilena: Portal. https://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-7683.html

* La autora es estudiante de la licenciatura en Arte y Creación del ITESO.

* Más críticas en Con Todo Respeto.

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